miércoles, 30 de noviembre de 2011

Hermann Gunnarson, goles, “talk show” y más de Hemmi Gunn

El nacimiento de los denominados “talk shows”, estos programas de entrevistas, se dio en la década del ´50 en Estados Unidos, muy vinculados a los magazines, y tuvieron su forma paradigmática con “El Show de Phil Donahue”. Impusieron un nuevo estilo en los medios, y a pesar de cambios de estilos, su idea originaria se mantiene, generalmente con vivencias personales dentro de una temática prefijada que suele cambiar en cada emisión del programa.

Pero, del otro lado del mundo, en esa década que asistía al origen de este formato televisivo, se criaba en Islandia el pequeño Hermann Gunnarson, un niño extrovertido, con evidente facilidad para los deportes, sobre todo fútbol y handball o balonmano, quien había nacido en diciembre de 1946.

No fue de extrañar entonces, que casi al mismo tiempo, debutara en Primera División del Fútbol de su país, representando al Knattspyrnufélagio Valur, de la capital Reikiavik, cuando apenas tenía 18 años; mientras que, justamente con el mismo equipo, que ya había incorporado al handball a sus disciplinas, también tuvo su debut, ambos en 1964, algo realmente extraño para el deporte mundial, pero en que Islandia no tomó demasiada trascendencia por algunos casos anteriores.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Gottfried Fuchs, el crack judío exiliado

Este futbolista alemán, nacido el 3 de mayo de 1889, pertenecía a la comunidad judía, motivo por el cual, al desencadenarse la Segunda Guerra Mundial, y a pesar de haber servido a su nación en un principio, debió trasladarse hacia Canadá, con un paso previo por Francia.

Es principalmente recordado por haberle anotado 10 goles, representando justamente a la selección de Alemania, a Rusia en los Juegos Olímpicos de 1912 en Suecia, el 1 de julio de ese año, siendo el máximo goleador del torneo, y hasta ese momento adorado en su país.

Incluso, con la camiseta de su país, disputó seis encuentros, convirtiendo un total de 13 goles, que le sitúan hasta el día de hoy como el internacional alemán con mejor promedio goleador de la historia, con un registro de 2,17 goles por encuentro. No obstante, fue excluido de las listas oficiales por el régimen nazi tan pronto llegó éste a adueñarse del deporte nacional.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Luigi Bertolini, la bandana del “settepolmoni”

Aunque ahora estamos acostumbrados a jugar al fútbol con pelotas de última tecnología, e incluso se ha hecho común que varios arqueros profesionales que se quejen de la liviandad de las mismas en las previas de los últimos Mundiales, hace muchas décadas, cuando este deporte comenzaba a afirmarse como el más popular del mundo, la situación era bien distinta.

De hecho, por aquellas épocas, en que las pelotas de trapo eran las protagonistas tanto de los picados como de las definiciones de las más importantes competencias nacionales e internacionales, mucho futbolistas sufrían las consecuencias de impactar los balones, sobre todo cuando estaban mojados, ya que esos materiales absorbían el agua, volviéndolos un elemento de real peligro. Y sin embargo, se recuerdan aún muchos especialistas en el arte de cabecear, pero seguramente ninguno tenía la costumbre de cubrir su frente con una bandana, como hacía el italiano Luigi Bertolini.

sábado, 5 de noviembre de 2011

Teodor Peterek, fidelidad al Ruch Chorzow

Apodado durante su carrera como “Teo”o “Mietlorz”, Peterek nació el 7 de noviembre de 1910 en la ciudad por entonces alemana de Swietochlowice, siendo uno de los más destacados representantes del fútbol de entreguerra en Polonia. De hecho, fue una de las localidades que más sufrió el paso de ambos ejércitos en esta contienda bélica.

En 1922, el gobierno de Swietochlowice, realizó un plebiscito en el cual poco más de la población de la ciudad prefería seguir perteneciendo a Alemania, pero ante las presiones de los sectores más adinerados, la misma pasó a formar parte de Polonia a los pocos meses, por lo que Teodor comenzó su carrera en el Slask local, a mediados de 1925, que ahora jugaba la liga polaca.

Sus actuaciones en este equipo fueron tan notables, que antes de cumplir 18 años, fue transferido al Ruch Chorzow, uno de los equipos más fuertes del país, donde debutaría recién al año siguiente, ante el LKS Lodz, y anotando justamente un gol en esa primera actuación. 
 

jueves, 3 de noviembre de 2011

Ion Oblemenco, figura del Universitatea Craiova

El FC Universitatea Craiova, un exitoso club rumano que atendió al esplendor de su equipo de fútbol en las décadas del ´70 y ´80, convirtiéndose por ejemplo en el primero en alcanzar semifinales de competiciones europeas, en la UEFA de la temporada 1982/83, se encuentra actualmente desafiliado de la Liga de su país, con motivo de la disputa judicial que mantiene con el entrenador Victor Piţurcă, ahora seleccionador local.

En sus conjuntos supieron brillar consagrados futbolistas, como por ejemplo Gheorghe Popescu, o Cristian Chivu, y sin embargo, su estadio, ubicado en el distrito de Dolj, lleva el nombre de Ion Oblemenco. Esto no es casual, se trata del máximo goleador en la historia de la institución, pero su vida, por muchas causas, merece ser analizada en detalle.

Hay que decir primero que este personaje nació en Corabia, Olt County, el 13 de mayo de 1945 comenzado su desempeño en un club de mínimo nivel profesional cuando tenía apenas 13 años de edad, concretamente el Progresul Corabia, el equipo más popular de los que abundaban en la región, y donde jugó hasta 1960.

martes, 1 de noviembre de 2011

Leopold Kielholz, lentes y goles de moda

Sus lentes, rasgo distintivo
Hace algunos días publiqué el post acerca de la vida de Achmad Nawir, aquel indonesio que se presentó en el Mundial de Francia en 1938 usando lentes comunes y corrientes, alejado de las innovaciones tecnológicas que propiciaron la misma práctica en el holandés Edgar Davids, aseguraba que se trató del primer futbolista en posibilitar algo así en una Copa del Mundo, y probablemente el único.

Por fortuna, considerando que sino este artículo no existiría, comprobé que estaba equivocado, ya que en el Mundial de Italia 1934, nos encontramos con un suizo, concretamente Leopold Kielholz, quien convirtió tres goles en la competencia, dos de ellos ante Holanda en la primera ronda y uno más en la derrota y eliminación ante Chescoslovaquia en la segunda; por lo que además fue el único en anotar goles en la mayor cita de este deporte, utilizando este accesorio.